turbios

Eran cerca de las siete de la tarde cuando sono mi teléfono, era Jorge:

- que esta'i haciendo weon?-

-nada perro, acabo de llegar al departamento, andaba con el "domingo" en el parque ¿por que?¿que ten'i?-

-sed weon, tengo mucha sed (reía) oye, te llámo por que voy a estar donde la "china sexual", por si te anima'i a ir-

["china sexual", asi le decimos a un restaurant chino de la calle Nueva York]

- vale weon, le doy de comer al "domingo" y nos vemos ahí en un rato ma', esta'i solo?-

-no weon, con un amigo-
-vale, nos vemos allá-

-ok. te espero, chao-.


Al rato llegue a la "china sexual", Jorge y su amigo habían llegado recién, asi que pedimos unos vodka tonic, bebida que nos gusta a todos, ademas de una porción-extra-grande de wantan para picotear, entre conversa y conversa, vodkas (4 en total) y wantan, nos anduvimos, mareando, de pronto José el amigo de Jorge dice:

---¿ weones, por que no vamos a webiar a un "Café con piernas" ?---

[tengo que ser honesto, nunca he ido a un café con piernas, por un cuento de prejuicios por lo que se cuenta, mezclado con verguenza ajena, pudor, etc. etc etc. )

Con Jorge nos miramos, se produjo un silencio que rápidamente se rompió con un... ¡¡¡Vamos poh weon!!! dijimos entre risas al mismo tiempo, y sin hacernos de rogar, pagamos la cuenta y partimos;

José nos llevo a un pasaje en la calle Huerfanos. Al entrar a ese antro, lo primero que te choca es el humo de cigarro, música muy fuerte (reggeton) oscuro, solo iluminado con luces azules y verde fluorecentes, puestas en lugares estratégicos, luces que cumplen la misión de destacar los "diminutisiiimoss colaless" que usan las chicas mulatas.

Eso si, como primerizo, fuí material de webeo por todos, las chicas me coqueteaban (como lo hacen con todos) y al no estar acostumbrado al trato que se le da al "cliente" me cohibía, y me sentía muy incomodo, eso provocaba la risas de mis amigos y la de nuestras "anfitrionas". Igual es algo chocante por llamarlo de alguna manera, chicas ecuatorianas (mulatas) muy altas, sobajeando toda su humanidad, sobre el cuerpo de uno, para ser la primera vez, es algo incomodo ¿no?

No voy a contar mayores detalles de esa noche, pero sí debo decir (y no es novedad) que los cafés con piernas son mucho mas que cafés cortados, capuccinos, y express turbiossss, muuuuy turbioss...

fue divertido, nos reimos mucho, eso sí, no creo que vuelva a ir.

3 comentarios:

Nanda dijo...

que wena historia... pero tanto como a quedar traumao? se supone que los hombres lo pasan bien ahi... jeje
pero bueno ahi tu veras...
y gracias por tu coment... demaciado nindo y tierno :) de tu parte
un besote grande....y un abrazo ;)

Jaime Ceresa® dijo...

A mi me paso lo mismo la vez que fui a un cafe con piernas..ese ambiente humedo..ese olor a sexo...las minas encima tuyo..no, no me gusto.

Loreto! dijo...

uuff! yo me imagino esos lugares llenos de viejos verdes calientes ansiosos de una presita jóven, debe ser el típico viejo que después del café llega a ver morandé con compañía a la casa y fantasear con la marlensita