Algo de niño

Comprenderán que el ser padre soltero
no resulta para nada fácil.

De un día para otro por "cosas de la vida"
me quedé sólo con mi hijo y vaya que mi vida cambio por completo, imagínense... sólo con un hijo de 3 años ufff fué duro.

Pero no todo fueron malos ratos,
también a sido muy provechoso y enriquecedor,
me sirvió para crear un
"lazo importante con mi socio"
(como me gusta llamarlo)
hoy tiene once años y somos reeyuntass...

Esta experiencia me ha servido para entender
lo difícil que es en nuestra sociedad el trabajo
de ser madre y padre a la vez,
el desvelarse cuando se enferman,
cuando tienes que pedir permiso en el trabajo,
correr de aquí para allá,
en fin ...se complica todo 100%

Como dije mi hijo tiene 11 años
y la experiencia de padre es increíble.

Mi personalidad algo infantil e inmadura
me ha ayudado a entender "los códigos de los niños" .

Los entiendo perfectamente,
me gusta jugar y compartir con ellos,
es más... aveces siento como si tuviera un imán,
por que a cada lado que voy se me acercan por cualquier motivo
y termino conversando o jugando con ellos.

Tengo un montón de sobrinos postizos,
hijos de mis amigos que me consideran el tío ideal,
los niños se entretienen más conmigo que con ellos...

Por ejemplo el otro día fui a la casa de mi gran amigo Eugenio
y justo estaba de aniversario de matrimonio,
con Carola su señora estaban muy complicados porque querían ir a comer
y no sabían con quién dejar a sus tres niños...
Tomas de ocho, Carolita de seis y Valentín una cosita irresistiblemente maravillosa de un año y medio...

Como no tenía nada que hacer me ofrecí a cuidarlos,
estaban tan agradecidos que me dijeron que a más tardar llegarían a media noche, les dije que no se preocuparan por la hora,
que disfrutaran su cena y yo me preocuparía por los niños...

Eran las ocho de la noche cuando se fueron, a la media hora después con Tomas y la Carola ya estábamos en plena "Guerra de Cojines" mientras Valentín jugaba en su andador con un patito de peluche...
Después nos bajó el hambre, pedimos unas ricas pizzas (que devoramos) descansamos un rato y seguimos jugando hasta que se me ocurrió una idea.

Les dije a los niños que yo sería un asaltante, un ladrón
que se robaría a Valentín...
y que ellos serían los policías que debían rescatarlo,
lo estábamos pasando tan bien que increíblemente se nos pasó la hora volando, ¡eran las 00:30 hrs! ¡¡¡cresta.!!!
se suponía que a esa hora debían estar durmiendo,
fué en ese preciso momento que abrieron la puerta,
entró Eugenio con su señora y vieron a mí Rehén pegado a la pared....